Turckheim como la mayoría de los pueblos de la región de Alsacia, con Estrasburgo a la cabeza, bien se podría definir como un pueblo con encanto o mejor dicho ciudad (desde 1312). Forma parte del "Sendero de los Vosgos" y de la "Ruta del Vino" y fue fundada en torno al año 700. Se encuentra muy cerca de Colmar (5-10 min) y para llegar es posible hacerlo con coche (alquilado como fue en nuestro caso) o bien en tren. Aprovechando que una amiga mía venía de visita con sus padres, organizamos una excursión de un día con salida desde Estrasburgo para visitar Turckheim y más tarde Eguisheim. En caso de que decidáis venir en tren deberéis primero llegar hasta Colmar y de ahí coger otro tren directamente a Turckheim. No tiene trenes directos desde Estrasburgo. La estación queda en las afueras del pueblo, a escasos 500m y al lado de ella hay una zona amplia donde poder dejar el coche. Nada más llegar (si lo hacemos desde la estación) lo primero con lo que nos encontramos es la "Puerta de Francia", una puerta abierta situada en una torre de piedra del siglo XIV. Existen otras puertas que también permiten la entrada a la ciudad en diferentes partes de la muralla que la rodea como son: la "Puerta de Brand" en el noroeste y la "Puerta de Munster" al oeste. Una vez que cruzamos la Puerta de Francia llegamos a la "Place Turenne", punto céntrico del casco antiguo. Muy cerca se encuentra también el edificio del Ayuntamiento y la iglesia románica. Pocos monumentos más hay que ver. El pueblo es muy pequeño, pero precioso y desde cualquier punto se ven los enormes viñedos que lo rodean. Es una buena opción para pasar la mañana o la tarde, puesto que no te llevará mucho tiempo visitarlo y se puede hacer en ruta con otros puesblos como Eguisheim o Kayserberg que se encuentran relativamente cerca. Si además te gusta el vino, Turckheim cuenta con numerosas bodegas y tiendas especializadas donde darte un capricho. Os subo un par de fotillos para que os animéis.